La Fábrica de Pereruela.

REFERENTES HISTÓRICOS

La tradición alfarera, la elaboración de cazuelas de barro, es un hecho histórico, que se remonta a los orígenes del municipio de Pereruela, como se puede constatar en diversas monografías editadas al respecto.

En el Diccionario Geográfico-Estadístico-Histórico de España de Madoz de 1850, se señala sobre Pereruela que es una “Alfarería a la que se dedican todos los vecinos; que el barro para la fabricación es de tal calidad que se endurece cuanto más se tiene en el fuego; y que por ello, son sumamente apreciadas sus vasijas.

INTERES DE LA ACTIVIDAD ALFARERA EN PERERUELA :

La actividad alfarera en Pereruela presenta un interés que difícilmente podrá disputarle otra localidad española, por dos razones:

1. Tradicionalmente  era una alfarería femenina.

2. Se sigue trabajando el barro con técnicas anteriores al descubrimiento y uso de la rueda o torno alfarero.

         La alfarería obra de mujeres tiene un origen muy antiguo, antes de la invención de la rueda alta, la cual siempre se utilizaba por los hombres. El interés de la alfarería de Pereruela aumenta si tenemos en cuenta que la actividad alfarera femenina ha ido desapareciendo en toda Europa.

La técnica del Urdido. Que es la que utilizamos en Pereruela. La pieza surge a partir de churros de arcilla de grosor variable, que se van uniendo para formar el fondo de la vasija. Después se añaden otros churros para levantar las paredes del cacharro.

PRESENTE Y FUTURO

En 1987 se produce un hecho fundamental en la Alfarería de Pereruela, es cuando el matrimonio formado por Afelio y Eladia, mis padres, construyen “La Fábrica”, nombre con el que los vecinos habían bautizado a este nuevo negocio, tan diferente en su organización a como se venía entendiendo el trabajo alfarero y que con el tiempo demostró que se podía conseguir la compatibilidad entre tradición, progreso y rentabilidad.

Al abrir las instalaciones se contrató a dos de las poquísimas personas que aún sabían hacer cazuelas y a otras para que aprendiesen, y se organizó un “Curso de Formación ocupacional” financiado por el INEM gracias al cual se pudo formar a varias mujeres jóvenes siguiendo las técnicas alfareras tradicionales de la localidad.

Lo que en principio había sido pensado como un mero negocio sin mayores pretensiones - mis padres eran bastante populares en la zona precisamente por su inquietud emprendedora y que tan de moda se ha puesto ahora-, supuso un cambio en la mentalidad de la localidad y la voz popular de nuestras alfareras cuando decían que iban o venían de “la fábrica” hizo que el nombre comercial no pudiera ser otro que “La Fábrica”.

Puede sintetizarse la trayectoria de la Fábrica a través de los siguientes hitos:

·            En 1976 sólo dos familias se dedican a la alfarería.

·            En 1987, se funda “La Fábrica” con una nueva estructura organizativa pero manteniendo la producción artesanal.

·            En el año 2001, con las nuevas necesidades logísticas de transporte construimos nuevas naves y nos trasladamos.

·            En el año 2007, ya en segunda generación tomo las riendas del negocio yo misma (siempre ayudada por la incombustible Eladia), entendiendo que las únicas opciones de crecimiento pasan por acceder al mercado extranjero

·            En 2022 son once las familias que viven de forma directa de “La Fábrica”, enviando más del 50% de la producción al extranjero.

·            En paralelo, muchos de los trabajadores que en su día estuvieron vinculados a “La Fábrica”, con el tiempo han continuado en el oficio creando sus propios talleres, estando en la actualidad más de treinta familias viviendo directa o indirectamente de la alfarería.

Toda esta evolución supuso un absoluto cambio de paradigma a nivel cultural, como social y económico porque:

·            Ya no se trataba de una actividad desprestigiada desde un punto de vista social, en esta circunstancia influyó mucho que yo misma, siendo Licenciada en Derecho y habiendo vivido varios años en Salamanca, regresara al pueblo para dar continuidad al negocio familiar. 

·            Se crearon puestos de trabajo estables y con horarios fijos. Ya no se dependía de la venta por las ferias o por los pueblos.

·            Las trabajadoras de “La Fábrica” aportaban un sueldo fijo en sus casas, lo que venía a ser una revolución en el modelo de economía familiar del entorno. Varias de las trabajadoras que empezaron en los años 70 y 80 disfrutan en la actualidad de pensiones equiparables o superiores a las de sus maridos debido al régimen de cotización al que han estado adscritas. Esto puede parecer una cuestión menor en otras regiones pero en Sayago, y en la mayor parte del entorno rural de Zamora es muy fácil de comprender.

CAMBIOS TECNOLÓGICOS Y DE PRODUCCIÓN:

·            Se ha mejorado las condiciones laborales, debido que los tornos que se empleaban en las casas para moldear el barro eran de madera sobre una piedra que hacía de base, trabajando las mujeres de rodillas. Debido a las nuevas condiciones de trabajo, de producción durante todo el año, se fabricaron los primeros tornos metálicos dotados con altura suficiente para que se puedan realizar las piezas en posición sentada.

·            Otra de las innovaciones logradas fue mejorar el sistema de cocido de las piezas, hasta 1987, sólo existían los tradicionales hornos al aire libre, lo que conllevaba que en el invierno, no se pudieran utilizar y que las piezas tuvieran acabados de cocción heterogéneos. Actualmente contamos con hornos de gasóleo, lo que nos permite trabajar durante todo el año y controlar la temperatura de cocción.

·            La preparación del barro, consistente en la mezcla de barro rojo y barro blanco, se hacía “pisando” el barro, hoy se realiza por medios mecánicos de amasado.

Hay que resaltar un hecho importante y es que la técnica de modelado es exactamente la misma que antiguamente: Sobre la rueda se coloca la maya (un anillo de barro), sobre la maya se pone la lusia, y es encima de la lusia donde hacemos las cazuelas, mediante la técnica del urdido. Es decir, al asiento de la pieza, que es lo primero que se hace, se van añadiendo trozos de barro que, con ambas manos, se van pegando al borde del mismo, y se van estirando, y así, hasta el final.

En el caso de “La Fábrica” seguimos fabricando el 100% de la producción a mano porque hemos visto cómo muchos pueblos alfareros del resto de España cayeron en el declive en el momento en el que vieron en la industrialización del moldeado una forma de abaratar costes. Hubo muchas poblaciones en España en las que la alfarería llegó a industrializarse hasta grados desproporcionados, el segundo paso consistió en importar productos de china y convertirse en meros intermediarios del barro, ya no fabricantes, el tercer paso fue la desaparición porque su producto ya no se diferenciaba de lo que toda la vida habían fabricado.

LOS SISTEMAS DE COMERCIALIZACION ,

Con independencia del valor cultural, antropológico, social que tenga la alfarería y todo lo que he dicho, para que un negocio funcione, los pueblos no se vacíen y las condiciones de vida de sus pobladores sean equiparables a las de otros entornos, hay que vender. Cuanto más, mejor.

Y la única forma de vender es llegar a donde está tu comprador y convencerle, hable el idioma que hable y le gusten las sopas de ajo, las pizzas o el pastel de cordero, (Shepherd's pie que dicen los británicos) y convencerle de que tu producto sirve y es el mejor para hacer esa comida típica de su país.

Ya en el siglo XXI, tenemos el mejor medio de divulgación de la historia, INTERNET, y tenemos las mejores infraestructuras y medios de transporte de la historia, y se pueden hacer transferencias económicas a 10.000 km. de distancia en menos tiempo del que se tarda en ir desde casa a un cajero a sacar dinero. Gracias a ello, hemos dejado de vender “al menudeo”, sólo a aquellos consumidores con los que pudiésemos hablar, y hemos sido capaces de vender a grandes distribuidores, tiendas, restaurantes e incluso consumidores de toda España y de todo el mundo sin llegar a conocerles personalmente.

Puede parecer que se ha perdido el romanticismo del perigüelano que venía con una mula cambiando los cacharros que su mujer fabricó en el invierno por garbanzos o lentejas, pero la única forma de pagar jornales a final de mes y la única forma de que las primeras alfareras que empezaron con mis padres hace treinta años tengan ahora mejores pensiones que sus maridos es la de fabricar y vender en cantidad y el mundo es infinito para poder conseguirlo.

VENTA EN :

. En el taller, tenemos un local donde se exponen y venden los productos que fabricamos, y además de la venta directa . Vendemos en toda España.

En Castilla-León son muy conocidas las cazuelas de Pereruela y la fama de las mismas hace que sea muy apreciada su utilización.

- Realizamos operaciones intracomunitarias con Portugal, Italia, Alemania, Austria, Suiza y Reino Unido exportaciones desde el Brexit.

También relizamos exportaciones: a Filipinas, Japón, Emiratos Arabes, Estados Unidos y en fin medio mundo y pensamos seguir ampliando.